miércoles, 24 de septiembre de 2014

DALE EL "PLAY" Y SUEÑA

La acción de ver una película significa apagar el mundo, desconectar, descansar. No es tan solo un DVD o un VHS, es mucho más que eso, es un mundo paralelo, o por lo menos lo es para mí. 

Desde que tengo uso de razón recuerdo como cada fin de semana, me acercaba hasta el videoclub más cercano acompañada de mi madre, para pasar unos diez minutos rondando por aquellos grandes pasillos hasta que por fin elegíamos una de aquellas películas. Podía pasarme horas y horas viendo esas viejas cintas de Disney donde disfrutaba junto a Peter Pan, Ariel y compañía, o simplemente tumbarme junto a mi madre intentando entender esas películas tan complicadas que me ponía para mayores.

Ahora he crecido, ya no soy aquella niña, sin embargo mi pasión por el cine no ha desaparecido, sino que más bien ha crecido conmigo. La gente a veces me preguntaba que cómo es posible que me haya visto tantas películas, si apenas tenemos tiempo para ello, pero como se suele decir: "El que quiere, saca tiempo". No hay semana que pase sin que yo me haya visto por lo menos un par de películas, sean del tipo que sean. Puede que nunca la haya visto o tal vez sea la vigésima cuarta vez que me la vea, pero aún así, ahí estaré yo, junto a mi televisor, ordenador o si el dinero lo permite, en un cine, disfrutando como cuando era aquella enana. 

Las películas hacen que nos olvidemos de nuestros problemas y que durante un par de hora más o menos imaginemos una vida que no  tenemos y disfrutemos de ella como si fuera nuestra. Que nos hagan creer que somos capaces de ser el mejor pianista del mundo o capaz de volar por encima del Atlántico, pero sobre todo que nos hagan soñar. 

Sé que quita tiempo, o que últimamente el cine está muy caro, pero sinceramente, sin esta maravilla, la vida sería un error. Háganme caso, vuélvanse cine adictos como yo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario